Podríamos definir un ecommerce como una tienda virtual. Un método de compraventa que utiliza internet como medio para realizar transacciones y contactar con sus consumidores. No sólo mediante una página web, sino también a través de las redes sociales. Estas suponen una fuente informativa con mucho impacto, y permiten acercarte y conocer más a tu público objetivo.
Administrar una tienda virtual es un trabajo lleno de desafíos. La rentabilidad del comercio electrónico sigue siendo baja en comparación con el comercio minorista físico, los costos operativos son altos y la adquisición de usuarios es cara. Según un estudio (disponible en portugués) realizado por ITBroker, empresa de inteligencia de mercado, que tiene como foco el marketing y las ventas, el 48% de las personas señala la demora en las entregas como un hecho de descontento con las compras virtuales. Ya el 22,7% se queja porque no recibieron la mercancía, mientras que el 15% de los consumidores se queja de haber comprado un artículo defectuoso.
Tanto si quieres montar tu propio ecommerce como si lo que buscas es capacitarte para poder optar a trabajar en una empresa online, programas como el Master en e-Commerce & Marketing Digital nacen con el objetivo de capacitarte para gestionar un comercio electrónico con una visión integral.